WILLEMSTAD - Tres venezolanos indocumentados que llevan diez meses detenidos en las celdas de migración de SDKK enviaron una carta urgente al primer ministro Pisas. En la misiva explican que las condiciones en las que se encuentran son precarias y que los han encerrado junto a delincuentes, aun cuando no han sido condenados.
Según Human Rights Defense, los tres tienen a alguien que los defienda, tal como exige la ley, el problema es que el gobierno no se adhiere a sus propias reglas, que establecen que una persona no puede estar detenida por más de seis meses. Según Human Rights Defense, los venezolanos están detenidos estructuralmente durante demasiado tiempo.
