WILLEMSTAD - La calidad de la comida en la prisión de SDKK vuelve a ser noticia. Según un portavoz, los internos se quejan de que la comida huele mal, está descompuesta e incluso contiene insectos.
La cocina de SDKK cerró hace más de un año. Desde entonces, un proveedor externo ha venido a preparar la comida. Los problemas con la comida han existido durante mucho tiempo. La administración responde a las quejas, pero según los reclusos no se realizan mejoras reales.
(Fuente: Dick Drayer)